"Los Kukis" juntos a la par

Cortesía de los Kukis

"Los kukis", "los rusitos", "Cris" y "Sabi" son los apodos de Sabina Gava y Cristian Minyersky. Hace 25 años dejaron Buenos Aires para viajar juntos por el mundo. Fue así que en 1989 llegaron a la isla de río más grande del mundo, la Isla Grande de Choele Choel. No lo pensaron, y del brazo de un amigo entraron a Luis Beltrán, a una chacra muy conocida por el pueblo,  por su belleza,  por ser una Esmeralda. A partir de ese momento, siempre que se fueron volvieron. "Nos enamoramos del lugar" expresa Minyersky.


Los Kukis, llenos de proyectos se instalaron en Luis Beltrán. Compraron una chacra cerca de "La Esmeralda". Más tarde pusieron una tienda de ropa en el centro de pueblo y, a fuerza de hombro, construyeron su casa. En los recreos se juntaban con un grupo de compañeros y compañeras para realizar obras y llevarlas a conocer en sus giras por distintos países.

Drante 1991 y hasta 2003 trabajaron como profesores en el Teatro el Galpón al que se acercaban desde los niños y niñas hasta los y las adultas para incursionar en la actuación, el baile y en la murga.

Sus sueños no tuvieron ni tienen techo. Compraron una casa que está rodeada por un brazo del río Negro. La casa tenía más de 90 años, comentan que estaba destruida, aún así el lugar les pareció fantástico. "Viajamos a Buenos Aires para comprar los vidrios y las puertas, fuimos a un desarmadero y conseguimos todo por menos que nada, de a poco formamos un lugar mágico". Explica "Kuki" mientras caminamos por la chacra. Su fin era construir un lugar de encuentro del arte en el que los y las visitantes se encuentren por unos días para realizar un retiro de canto, clown, talleres de acroyoga, contact entre otros y en el que además se relacionen con la madre tierra, y lo lograron.

    Pasillo de la Casa Mágica:
 comunica la cocina con la sala de prácticas

En las reuniones disfrutan del sol, del agua cálida del río, comen frutos autóctonos de la chacra con elaboración propia sin conservantes o elementos tóxicos. A pesar de que la casa no es muy conocida por los habitantes del pueblo, al lugar llegan personas de distintas partes del país y del mundo.

Pero esto no es todo. Hace varios años, los Kukis asisten a capacitaciones sobre construcción de casas con elementos naturales que se dictan en distintos países. En "La Esmeralda" construyeron un refugio de adobe. Su próxima tarea fue compartir sus  conocimientos con otras personas, ayudarlas para que puedan tener su hogar con pocos materiales para brindarle un lugar seguro y natural a su familia. La idea se hizo pública y no tardó en llegar a oídos de las autoridades de la localidad. El Consejo Deliberante declaró la ordenanza que autorizó la construcción natural de casas el 16 de Septiempre de 2010.

Camino que conduce a orillas del río Negro

Actualmente los Kukis junto a otras personas, que llegaron a Beltrán en distintos momentos, organizaron un  Colectivo Artístico, Cultural y Social del Valle Medio. Es un grupo organizado, conformado por docentes, bailarines, músicos, actores, pintores, cineastas, reflexólogos, agricultores y agentes de conservación. Están comprometidos con la permacultura, el cuidado de las personas y el medio ambiente.



"Creemos fielmente que el arte es una herramienta de transformación, vinculándonos con él y ejercitando la sensibilidad podemos generar un encuentro capaz de cambiar nuestros días, cambiando lo cotidiano y así convivir en armonía respetando la naturaleza", señala el documento del proyecto.

Calipso y Capea
Cortesía de los Kukis

El grupo artístico propone espectáculos entre ellos una Obra Teatral para adolescentes y adultos que recorrió la región y convocó a un numeroso y variado público. Calipso y Capea, una historia para niños representada por dos payasos es otra alternativa. A su vez, ofrece Ciclos y Festivales Populares, por ejemplo Kermesse para toda la familia es así que animaron el aniversario de Belisle, también realizaron una Pekermesseen Fiske Menuko, entre otros. Los talleres de capacitación para el cuidado de las personas y el  medioambiente no podían quedar afuera, se enseña huerta familiar, invernadero con botellas recicladas, uso responsable de leña, plantas medicinales, entre otros talleres.

Integrantes de la Cooperativa realizando "el techo vivo" 

Lo novedoso es que los integrantes del grupo impulsaron una cooperativa y compraron 10 hectáreas al lado de la Casa Mágica. Las hectáreas se dividen en terrenos proporcionales para que cada integrante de la cooperativa construya su hogar, sin lugar a dudas, todo lo que constituye la casa es natural desde la calefacción hasta los techos vivos. Si bien, este es el comienzo, de a poco personas de los distintos puntos del país están interesados con el proyecto.



"La Casa Mágica", no es sólo un lugar de encuentro del arte, es un lugar que transmite luz propia. La magnificencia se encuentra suspendida en el aire, está escondida en los rincones, pintada de un abanico de colores esperando ser contemplados. La Magia finalmente fue conocer  una parte de la historia de los Kukis, su sabiduría y solidaridad, su compromiso con el arte, tan inmenso y eterno, como eterno es su amor.

Los Kukis posando en la Sala de Prácticas